ALQUILER BARCO SIN LICENCIAen Hungría

Embárquese en un crucero por los ríos y lagos de Hungría, con nuestros barcos NICOLS, las primeras embarcaciones habitables que se pueden alquilar en el país sin carnet. Hungría, hasta ahora «virgen» en materia de turismo fluvial, es un auténtico paraíso escondido que explorar desde el agua. Durante su navegación por Hungría, le conquistarán la serenidad y los paisajes perfectamente preservados de este verdadero paraíso para pescadores, ornitólogos y amantes de la navegación de recreo.

Un espectáculo emblemático que puede descubrir al alquilar un barco en Hungría es la floración del río Tisza. Cada año, entre finales de mayo y principios de junio, miles de efímeras, unos insectos de cola larga que se parecen a las libélulas, vuelan en enjambres sobre la superficie del río. Este acontecimiento único que apenas dura tres o cuatro días es uno de los fenómenos naturales más fascinantes de los ríos europeos, del que podrá disfrutar durante un crucero fluvial por Hungría.

Nuestras bases náuticas en Hungría

Saliendo de nuestra base fluvial de Kisköre, navegará en pleno corazón de la mítica Gran Llanura Húngara y del parque nacional de Hortobágy, por el río Tisza y el lago Tisza. A bordo de su barco sin permiso, explorará la puszta, una región de estepas única en Europa, donde conviven manadas de búfalos, bueyes y caballos salvajes bajo la atenta mirada de los csikós vestidos con el atuendo tradicional.

Desde nuestra base náutica de Tokaj, puede alquilar un barco para recorrer el río Bodrog y el alto Tisza hasta el corazón de la tierra del famoso vino de Tokaj. A bordo de su embarcación, descubrirá un paisaje de viñedos milenarios a los pies de los montes Zemplén, unos antiguos volcanes cubiertos por bosques.

Testimonios de nuestrosclientes

«¡Estas vacaciones en barco en Hungría fueron todo un descubrimiento! Nos encantó este país con tanta alma y los pueblecitos que íbamos descubriendo en nuestras escalas con el barco de alquiler. Tuvimos un auténtico flechazo con el lago Tisza y sus pequeños pueblecitos preservados del turismo masivo».

Laurent, 34 años, en pareja

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